La noche de ayer dejo de existir el conocido Filantropo Abraham Bishara.
Superó el siglo de vida. Cumplió 103 años de edad, pero parece que
tuviera menos; está lúcido, sabe lo que pasa a su alrededor, se halla informado
del quehacer noticioso. Su edad se evidencia en sus pasos que cada vez están
más lentos y su sentido auditivo está desmejorado.
Bishara, que en árabe significa anunciación de la Virgen María, es su primer nombre, Abraham el segundo y Abedrabbo Abedrabbo sus apellidos. Nació el 10 de julio de 1910 en Belén, Palestina, hijo de Saba Abedrabbo y de Bishara Abraham Abedrabbo.
Proveniente de una familia acomodada económicamente, hizo sus estudios primarios y secundarios en Jerusalén en colegios católicos; desde su niñez nació la solidaridad y el amor por ayudar al prójimo, también anheló ser sacerdote lo que también le acrecentó el don de ser más humanitario.
Quiso ser sacerdote
Mientras estuvo en el Seminario ‘Patriarca Latino’ de Jerusalén y se preparaba para el sacerdocio, estudió Música, Religión e Inglés. Bishara Abraham habla seis idiomas: Árabe que es su lengua materna, Inglés, Francés, Latín, Italiano y Español.
La salida de su país de origen se da debido a la guerra entre israelitas y palestinos. Bishara junto a su esposa, Olga Hazbum (+) ambos provenientes de familia adinerada, cambiaron la comodidad y la riqueza por la tranquilidad y la paz, estuvieron en España antes de llegar al Ecuador.
Primero se radicaron en Ambato, en 1960, donde la pareja vivió 10 años; allí el maestro Bishara empezó a trabajar enseñando lo que solo él sabe hacer música y fue escogiendo las mejores voces ambateñas.
Llegó a Esmeraldas
Así, formó un coro en uno de los centros educativos donde trabajó; a la par que enseñaba Música, también impartía clases de Inglés, mientras que su esposa enseñaba ballet.
Luego de unos años de estar radicados en Ambato, su esposa Olga empezó con problemas de salud y la recomendación médica fue que debía vivir en una ciudad de la Costa, visitaron Guayaquil y otras ciudades, pero no les gusto, es así que en 1970 el lugar elegido para estos extranjeros fue Esmeraldas.
Olga Hazbum tocaba muy bien el piano y bailaba ballet. Sus conocimientos fueron compartidos hacia la niñez ambateña y esmeraldeña. Uno de los recuerdos más tristes que perduran en la memoria del maestro Bishara, es la muerte de su esposa y compañera de toda la vida, ocurrida en 1983.
Su salud se deteriora
Antes de que Bishara Abraham cumpliera el siglo de vida, viene creyendo años tras años que será el último que estará con vida. Su salud se quebranta y eso a veces lo deprime al punto que dice que prefiere morir y descansar antes de llegar a un extremo de no servirse por si solo.
Actualmente está bajo los cuidados y compañía de su sobrino Omar Amador. “Las dolencias de Abraham Bishara no son por enfermedad sino que son propias de la edad”, dijo el pariente.
El lleva una vida con alimentación sana y alejada del alcohol, cigarrillos y toda droga que perjudique el alma y la humanidad, le han ayudado a que el pasado 10 de julio cumpliera 103 años de vida, de ellos 21 los ha dedicado a ayudar a los pobres de Esmeraldas.
Bishara, que en árabe significa anunciación de la Virgen María, es su primer nombre, Abraham el segundo y Abedrabbo Abedrabbo sus apellidos. Nació el 10 de julio de 1910 en Belén, Palestina, hijo de Saba Abedrabbo y de Bishara Abraham Abedrabbo.
Proveniente de una familia acomodada económicamente, hizo sus estudios primarios y secundarios en Jerusalén en colegios católicos; desde su niñez nació la solidaridad y el amor por ayudar al prójimo, también anheló ser sacerdote lo que también le acrecentó el don de ser más humanitario.
Quiso ser sacerdote
Mientras estuvo en el Seminario ‘Patriarca Latino’ de Jerusalén y se preparaba para el sacerdocio, estudió Música, Religión e Inglés. Bishara Abraham habla seis idiomas: Árabe que es su lengua materna, Inglés, Francés, Latín, Italiano y Español.
La salida de su país de origen se da debido a la guerra entre israelitas y palestinos. Bishara junto a su esposa, Olga Hazbum (+) ambos provenientes de familia adinerada, cambiaron la comodidad y la riqueza por la tranquilidad y la paz, estuvieron en España antes de llegar al Ecuador.
Primero se radicaron en Ambato, en 1960, donde la pareja vivió 10 años; allí el maestro Bishara empezó a trabajar enseñando lo que solo él sabe hacer música y fue escogiendo las mejores voces ambateñas.
Llegó a Esmeraldas
Así, formó un coro en uno de los centros educativos donde trabajó; a la par que enseñaba Música, también impartía clases de Inglés, mientras que su esposa enseñaba ballet.
Luego de unos años de estar radicados en Ambato, su esposa Olga empezó con problemas de salud y la recomendación médica fue que debía vivir en una ciudad de la Costa, visitaron Guayaquil y otras ciudades, pero no les gusto, es así que en 1970 el lugar elegido para estos extranjeros fue Esmeraldas.
Olga Hazbum tocaba muy bien el piano y bailaba ballet. Sus conocimientos fueron compartidos hacia la niñez ambateña y esmeraldeña. Uno de los recuerdos más tristes que perduran en la memoria del maestro Bishara, es la muerte de su esposa y compañera de toda la vida, ocurrida en 1983.
Su salud se deteriora
Antes de que Bishara Abraham cumpliera el siglo de vida, viene creyendo años tras años que será el último que estará con vida. Su salud se quebranta y eso a veces lo deprime al punto que dice que prefiere morir y descansar antes de llegar a un extremo de no servirse por si solo.
Actualmente está bajo los cuidados y compañía de su sobrino Omar Amador. “Las dolencias de Abraham Bishara no son por enfermedad sino que son propias de la edad”, dijo el pariente.
El lleva una vida con alimentación sana y alejada del alcohol, cigarrillos y toda droga que perjudique el alma y la humanidad, le han ayudado a que el pasado 10 de julio cumpliera 103 años de vida, de ellos 21 los ha dedicado a ayudar a los pobres de Esmeraldas.
FUENTE : LA HORA
Muy triste por buscar sobre el y enterarme que ya dejo este mundo un excelente ser humano ayer lo soñé y necesitaba saber de él que pena Bishara te llevo en el corazón
ResponderEliminar