Hace 15 días
aproximadamente dos pescadores de la parroquia Súa fueron víctimas de la
piratería en alta mar, quienes perdieron, a manos de los delincuentes, todo el
marisco capturado, el material de pesca y el motor fuera de borda.
Boris Chila, uno de los pescadores
que vivió la nefasta odisea comentó que fueron interceptados como a la 5 de la
madrugada del día del asalto, por 8 antisociales, quienes les amenazaron con
armas de grueso calibre y luego de obligarles a ubicarse boca abajo en el plan
de la lancha, los antisociales procedieron a sustraerse todo lo que ellos
consideraban de valor.
El humilde pescador señala que,
felizmente no fueron golpeados, pues los antisociales les dejaron al garete al
interior de la embarcación y a los 15 minutos fueron rescatados por personal de
la marina, quienes dieron informe inmediato a la Capitanía de Puerto, pero pese al poco tiempo
transcurrido desde el suceso hasta el aviso, las autoridades marítima no
pudieron dar con el paradero de los antisociales.
Chila señala que en el mes de
octubre del año anterior fueron asaltados en iguales circunstancias su hermano
y su padre, en el mismo lugar, por lo que, a su criterio, los piratas conocen
el área y aun así, las autoridades de la Marina no son efectivos en su
accionar, por lo que insiste en su llamado a las autoridades para que sean más
eficientes y puedan garantizar, de alguna manera, la seguridad de los
pescadores.
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